Hilel
(Lucas) Perek (Capitulo) 17.
01 Dijo el Rabino Yeshua a
sus Talmidim (Discípulos): Imposible
es que no vengan tropiezos; mas ¡ay de aquel por quien vienen!
02 Mejor le fuera que se le
atase al cuello una piedra de molino y se le arrojase al mar, que hacer
tropezar a uno de estos pequeñitos.
03 Mirad por vosotros mismos.
Si tu hermano pecare contra ti, repréndele; y si se arrepintiere, perdónale.
04 Y si siete veces al día
pecare contra ti, y siete veces al día volviere a ti, diciendo: Me arrepiento;
perdónale.
05 Dijeron los Shelijim
(Enviados) al Señor Yeshua: Auméntanos la fe en el Eterno.
06 Entonces el Señor Yeshua
dijo: Si tuvierais fe en el Eterno como un grano de mostaza, podríais decir a
este árbol de sicómoro: Desarráigate, y plántate en el mar; y les obedecería.
07 ¿Quién de vosotros,
teniendo un siervo que ara o apacienta ganado, al volver él del campo, luego le
dice: Pasa, siéntate a la mesa?
08 ¿No le dice más bien:
Prepárame la cena, cíñete, y sírveme hasta que haya comido y bebido; y después
de esto, come y bebe tú?
09 ¿Acaso da gracias al
siervo porque hizo lo que se le había mandado? Pienso que no.
10 Así también vosotros,
cuando hayáis hecho todo lo que os ha sido ordenado en esta Yeshiva (Escuela Superior) mía, decid: Siervos
inútiles somos, pues lo que debíamos hacer, hicimos.
11 Yendo el Rabino Yeshua a
Jerusalén, pasaba entre Samaria y Galilea.
12 Y al entrar en una aldea,
le salieron al encuentro diez hombres tzaraat (manchas blancas), los cuales se
pararon de lejos
13 y alzaron la voz,
diciendo: ¡Yeshua, Maestro, ten misericordia de nosotros y cúranos como Baal Shem Tov (Persona del Buen Nombre)
que eres!
14 Cuando él los vio, les
dijo: Id, mostraos a los Cohen Ha Gadol (Sumos Sacerdotes) saduceos falsos. Y
aconteció que mientras iban, fueron limpiados.
15 Entonces uno de ellos,
viendo que había sido sanado, volvió, glorificando a Adonai a gran voz,
16 y se postró rostro en
tierra a sus pies, dándole gracias; y éste era samaritano de Padre Judío y de
madre venida de Babilonia.
17 Respondiendo el Rabino
Yeshua, dijo: ¿No son diez los que fueron limpiados? Y los nueve, ¿dónde están?
18 ¿No hubo quien volviese y
diese gloria a Adonai sino este Guer (No Judío)? Nota:
El Judío nace Judío de su Madre Judía y no del Padre Judío.
19 Y le dijo: Levántate,
vete; tu fe en Hashem te ha salvado.
20 Preguntado los
Rabinos fariseos del Rabino Shamai, cuándo había de venir el reino Eterno de Adonai,
les respondió y dijo: El reino Eterno de Adonai no vendrá con advertencia,
21 ni dirán: Helo aquí, o
helo allí; porque he aquí el reino Eterno de Adonai está entre vosotros en la
Verdadera Enseñanza de la Tora.
22 Y dijo a sus Talmidim (Discípulos): Tiempo vendrá
cuando desearéis ver uno de los días del Hijo del Hombre, y no lo veréis.
23 Y les dirán: Helo aquí, o
helo allí. No vayáis, ni los sigáis.
24 Porque como el relámpago
que al fulgurar resplandece desde un extremo del cielo hasta el otro, así
también será el Hijo del Hombre en su día.
25 Pero primero es necesario
que padezca mucho, y sea desechado por esta generación. Isaias:53.
26 Como fue en los días de Noaj (Noé), así también será en los
días del Hijo del Hombre.
27 Comían, bebían, se
casaban y se daban en casamiento con animales, hasta el día en que entró Noé en el arca, y
vino el diluvio y los destruyó a todos.
28 Asimismo como sucedió en
los días de Lot; comían, bebían, compraban, vendían, plantaban, edificaban;
29 más el día en que Lot
salió de Sodoma, en el amanecer les llovió del cielo fuego y azufre, y los destruyó a todos.
30 Así será el día en que el
Hijo del Hombre se manifieste.
31 En aquel día de la destrucción de Jerusalén, el que esté
en la azotea, y sus bienes en casa, no descienda a tomarlos; y el que en el
campo, asimismo no vuelva atrás.
32 Acordaos de la mujer de
Lot.
33 Todo el que procure
salvar su vida en la Enseñanza falsa de los Rabinos fariseos del Rabino Shamai, la
perderá; y todo el que la pierda por mis Enseñanzas, la salvará.
34 Les digo que en aquella
noche cuando venga el Mesías estarán dos en una cama; el uno será tomado, y el otro será dejado.
35 Dos mujeres estarán
moliendo juntas; la una será tomada, y la otra dejada.
36 Dos estarán en el campo;
el uno será tomado, y el otro dejado.
37 Y respondiendo, le
dijeron: ¿Dónde, Señor? El les dijo: Donde estuviere el cuerpo, allí se
juntarán también el Águila de Hashem. Nota:
Hashem (El Misericordioso) simboliza al Águila que salva a sus hijos.
Hilel
(Lucas) Perek (Capitulo) 18.
01 También les refirió el
Rabino Yeshua una Mashal (Palabras
que Benefician a unos y Perjudican a otros) sobre la necesidad de orar siempre,
y no desmayar,
02 diciendo: Había en una
ciudad un juez, que ni temía a Elokim
(Juez Eterno), ni respetaba a hombre.
03 Había también en aquella
ciudad una viuda, la cual venía a él, diciendo: Hazme justicia de mi
adversario.
04 Y él no quiso por algún
tiempo; pero después de esto dijo dentro de sí: Aunque ni temo a Elokim (Juez Eterno), ni tengo respeto
al Ish (hombre),
05 sin embargo, porque esta
viuda me es molesta, le haré justicia, no sea que viniendo de continuo, me
agote la paciencia.
06 Y dijo el Señor: Oíd lo
que dijo el juez injusto.
07 ¿Y acaso Elokim (Juez
Eterno) no hará justicia a su Pueblo escogido Israel, que clama a él día y
noche? ¿Se tardará en responderles?
08 Les digo que pronto les
hará justicia. Pero cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra?
Pues todo será fácil
Otra Mashal
(Palabras que Benefician a unos y Perjudican a otros) del fariseo de Shamai y el publicano.
09 A unos Rabinos fariseos
del Rabino Shamai que confiaban en sí mismos como Tzadikim
(justos), y menospreciaban a los otros hombres del Pueblo, dijo también está Mashal (Palabras que Benefician a unos
y Perjudican a otros):
10 Dos hombres subieron al Bet Hamikdash (Templo de Jerusalén) a
hacer Tefila (orar): uno era Rabino
fariseo de la Yeshiva (Escuela Superior) del Rabino Shamai, y el otro publicano (Cobrador de Impuestos para Roma).
11 El Rabino fariseo del Rabino Shamai, puesto en pie en el Patio del Templo, oraba consigo mismo de esta
manera: Adonai, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones,
injustos, adúlteros, ni aun como este publicano;
12 hago Taanit (ayuno) dos veces a la semana antes del día del Shabat (Reposo), doy Maaser (diezmos) de todos los frutos de
mi cosecha y de mi ganado.
13 Mas el publicano, estando
lejos, no quería ni aun alzar los ojos al cielo arriba del Templo de Jerusalén,
sino que se golpeaba el pecho, diciendo: Hashem, sé propicio a mí, pecador.
14 Les digo que éste
descendió a su casa justificado antes que el otro; porque cualquiera que se
enaltece, será humillado; y el que se humilla será enaltecido.
15 Traían a él los niños
para que los tocase; lo cual viendo los discípulos, les reprendieron.
16 Mas el Rabino Yeshua, llamándolos,
dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es
el reino de Adonai.
17 De cierto os digo, que el
que no recibe el reino de Adonai como un niño, no entrará en él y los bendijo
así a los niños “que el eterno te haga como Efraím y Menashe” y a las niñas les
decía “ que el Eterno te haga como Sara, Rivka, Lea y Rajel” y después
añadía “Yevarejeja Adonai Veyishmereja, Yaer Adonai Panaveleja Vijuneka Yisha
Adonai Panaveleja, Veyasem Leja Shalom ("El Señor te bendiga y te
guarde; el Señor te mire con agrado y te extienda su amor; el Señor te muestre
su favor y te conceda la paz.").
18 Un hombre Rico principal
le preguntó, diciendo: Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna?
19 El Rabino Yeshua le dijo:
¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino sólo Hashem.
20 Los Mandamientos sabes:
No adulterarás; no matarás; no hurtarás; no dirás falso testimonio; honra a tu
padre y a tu madre.
21 El dijo: Todo esto lo he
guardado desde mi juventud.
22 El Rabino Yeshua, oyendo
esto, le dijo: Aún te falta una cosa: vende todo lo que tienes, y dalo a los
pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme.
23 Entonces él, oyendo esto,
se puso muy triste, porque era muy rico.
24 Al ver el Rabino Yeshua
que se había entristecido mucho, dijo: ¡Cuán difícilmente entrarán en el reino
Eterno de Adonai los que tienen riquezas!
25 Porque es más fácil pasar
un camello por el ojo de una aguja, que entrar un rico en el reino de Adonai.
26 Y los que oyeron esto
dijeron: ¿Quién, pues, podrá ser salvo?
27 El les dijo: Lo que es
imposible para los hombres, es posible para Hashem.
28 Entonces el Talmid (Discípulo) Kefa dijo: He
aquí, nosotros hemos dejado nuestras posesiones y te hemos seguido.
29 Y él les dijo: De cierto
os digo, que no hay nadie que haya dejado casa, o padres, o hermanos, o mujer,
o hijos, por el reino Eterno de Adonai,
30 que no haya de recibir
mucho más en este tiempo, y en el siglo venidero la vida eterna.
31 Tomando el Rabino Yeshua
a los doce, les dijo: He aquí subimos a Jerusalén, y se cumplirán todas las
cosas escritas por los Neviim (Profetas = Predicadores) acerca del Hijo del
Hombre.
32 Pues será entregado a los
gentiles romanos, y será insultado, y injuriado, y escupido.
33 Y después que le hayan
azotado los Romanos, le matarán; mas al tercer día resucitará.
34 Pero ellos nada
comprendieron de estas cosas, y esta palabra les era encubierta, y no entendían
lo que se les decía.
35 Aconteció que acercándose
el Rabino Yeshua a Jericó, un ciego estaba sentado junto al camino mendigando;
36 y al oír a la multitud
que pasaba, preguntó qué era aquello.
37 Y le dijeron que pasaba
el Rabino Yeshua el nazareno.
38 Entonces dio voces,
diciendo: ¡Rabí. Yeshua, Hijo de David, ten misericordia de mí!
39 Y los que iban delante le
reprendían para que callase; pero él clamaba mucho más: ¡Hijo de David, ten
misericordia de mí!
40 El Rabino Yeshua
entonces, deteniéndose, mandó traerle a su presencia; y cuando llegó, le
preguntó,
41 diciendo: ¿Qué quieres
que te haga? Y él dijo: Adon (Señor)
y Baal Shem Tov (Persona del Buen
Nombre), que reciba la vista.
42 El Baal Shem Tov (Persona del Buen Nombre) Yeshua le dijo: Recíbela,
tu fe en Hashem te ha salvado.
43 Y luego vio, y le seguía,
glorificando a Hashem; y todo el pueblo, cuando vio aquello, dio alabanza a
Hashem.
Es muy importante poder saber y entender la verdadera interpretacion de la palabra de Dios
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